 El automasaje es uno de los mejores regalos que puede hacerse a sí mismo. Significa dedicarse tiempo, cuidado y atención, aceptar la responsabilidad sobre su propia salud y felicidad y tratarse como si fuera su mejor amigo. No se puede negar la experiencia única que significa recibir un masaje de un persona amiga o de un profesional. El automasje nunca podrá sustituirlo, pero lleva consigo sus propias recompensas únicas, la más importante de las cuales consiste en desarrollar una relación saludable y cariñosa con el propio cuerpo. Una reciente investigación de la revista New Woman revelo que solo una de cada diez mujeres se siente feliz con su cuerpo, y cada vez está más claro que ese problema también afecta a los hombros. La misma investigación revelo que las mujeres suelen utilizar esto como excusa para no alcanzar lo que desean en sus vidas. La insatisfacción con respecto al propio cuerpo inhibe nuestro disfrute de la vida; es una verdadera tragedia humana a escala colosal. Para romper este círculo paralizante, debemos aceptamos y gustarnos tal como somos. Siempre podemos esforzarnos por mejorar nuestra salud y nuestros niveles de esbeltez, pero tales esfuerzos solo serán saludable si nos aceptamos como seres fundamentalmente atractivos y dignos de cariño, sean fueren las mejoras que queramos alcanzar. Dar masaje a nuestro cuerpos son cariño es la mejor forma que conozco de generar más respeto por nosotros mismos. Y solo cuando sentimos respeto, paz y felicidad interior puede ser la vida algo divertido, alegre y digna de disfrutarla, y solo al aceptarnos y querernos a nosotros mismos podemos aceptar y querer a los demás.
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